domingo, abril 30, 2006

Lacroze

Lacroze y Corrientes. La dársena central es la misma de siempre, el 123 espera y la lluvia cae. Estoy acá como tantas veces, casi como siempre. Esta vez los movimientos son más lentos, el tiempo no corre a la velocidad usual porque estamos juntos. Por primera vez tu actitud es diferente, estás ahí y en vez de hacer un millón de chistes estupidos estas callado; yo espero, es lo que mejor me sale. Finalmente la escena soñada se está cumpliendo, nos escuchamos pero no se oye nada. Veo a la distancia lo ocurrido como si fuera la escena de una película romántica. Siento mariposas en el estómago. Por fin llegó el momento.
Sigo con los ojos abiertos pero ya no estoy soñando. Estoy frente a la computadora, en la oficina, marchitandome como siempre. Soñando. Escribiendo para demorar la muerte.


miércoles, abril 26, 2006

Mails muy viejos

Estoy encontrando muchas cosas viejas. Algunos de los textos no tienen demasiado sentido o lo han perdido por la falta de contexto. Este mail corresponde a una serie de mails que me escribí con Ariel cuando el intentaba conquistarme... No se si es un lindo recuerdo, uno muy triste o simplemente un recuerdo.


De rojos colores se inundará mi rostro si persite en
tan elogiosa redundancia. El maquillaje es solo una
excusa, para poner en juego todos mis artificios de
torero, o de matarife. La realidad es que me puedo
llegar a enfrentar a una tosuda bestia (que esto no se malentienda,
me refiero a la perseverancia de mi rival por elogiarme).
El toro que se anima a desafiar esta> humilde, pero no menos certera capa, parece querer
ir directo hacia un punto y mis artificios pueden por
momentos ser equivocos en cuanto a querer engañar al animal.
Sin duda la exposición a los rayos de febo han sido
totales, pero mi palido traje ha de soportar las
quemaduras, para poder seguir adelante.
De todas maneras, esta gracil y certera lengua
viperina agradece profundamente todas las
redundancias hacia su engañosa y gracil persona, que no es ni mas
ni menos, que un simple disfraz para engañar a quienes
no pueden ver el costado traicionero de este reptil
que conduce directamente hacia la tentación, pero que
no se hace cargo de la manzana que ha sido
degustada.

sábado, abril 15, 2006

Ni idea

Erase una vez, una pequeña ciudad ubicada en el extremo sur de un gran mundo. Sus habitantes provenían de todas las latitudes aunque ya habían olvidado eso. Un día comenzaron a creer que eran grandes y que su ciudad era enorme. Fantaseaban acerca de lo conocidos que eran en todo el mundo y del prestigio que tenían. Entonces fue cuando las cosas comenzaron a cambiar. Las tardes ya no llegaban con las puertas de los hogares abiertas, las casa comenzaban a ser feas, con costosos aparatos eléctricos y los chicos ya no disfrutaban del picadito en la esquina.

Las cosas se pusieron peor. En una oportunidad, voy a contar sólo un aspecto de esta pequeña ciudad poblada de pequeñas personas que se engañaban y creían grandes, ...
Dentista...

Debemos hablar claramente de estas personas (dentistas, odontólogos y afines) no como profesionales de la salud sino como profesionales sin salud. O sea, deberíamos tratarlos como gente con una patología ya que realmente no me imagino como alguien puede querer ser Odontologo.
Imaginense, un tirno niñito o niñita de hermosos 6 años, con cutis diáfano y cara de angel. Le preguntas: ¿Qué queres ser cuando seas grande? A lo que uno siempre espera una respuesta cargada de ilusiones, en la que el pequeñin plasme su amor por alguna disciplina cuasi ideal o por alguien al que admira mucho, entonces el infante con su hermosa carita sin puntos negros contesta... quiero ser dentista ¡Por Dios! ¿A quién admira este chico a Jason? Me imagino que en su cuarto en vez de tener autitos o muñecas tiene animalitos disecados y una extensa colección de pinzas y tijeras.... Va de retro SATANAS ¡Es el hijo del demonio!
Volviendo al profesional adulto que a diario trabaja quitando muelas, limpiando encias y colocando aparatos correctos. ¿Cómo puede estar cuerda una persona cuyos elementos de trabajo son cuchillos, garfios y pinzas?
Más alla de la necesidad de los seres humanos de quitarnos una muela si nos duele o de mantener la salud bucal en perfectas condiciones no recomendaría a ningún adolescente pre universitario que se dedicara a una profesión tan... como decirlo: SÁDICA.
En fin, tengo que sacarme 2 muelas más por lo que mi resentimiento irá en aumento en los próximos meses pero quiero que sepan todos que no es bueno ser Dentista, tampoco ser amigo y/o pareja de uno. Hagamos una campaña que nos permita internar a toda esa gente junta y aseguremonos que nadie pueda encontrar la llave.
Un poco de mí

A ver si entendemos algo. Llegué al mundo siendo la segunda hija de un matrimonio joven. Mis padres no sabían que iban a tener una mujer por lo que no pensaron nombres de nena. Mi hermana entusiasmada con un hermanito al enterarse quiso devolverme y en medio de todo eso cayó mi tía adolescente y me ligué el nombre que no le pudieron poner a ella.
A los 3 me quede bizquita y mi mamá me decía -intuyo que para hacerme sentir mejor- que era como Clarence el león de la selva. El tema es que yo en esa época tenía el pelo lacio como spaghetti por lo que debo creer que mi mamá además es bruja ya que ahora no veo doble (gracias a la ciencia médica) pero tengo más rulos que Diana en V Invasión Extraterrestre.
Hasta ahí maso. Repasamos, bizca y agrego: corte principito valiente, dos temas que ponen en duda el amor parental. Como contracara de mi figura estaba mi hermana, la mayor, rubia de pelo lacio, simpática (cuando quería obvio) dulce, estudiosa. Para mí era como Nelly de la familia Ingals. Extrañamente yo tenía cierta admiración hacia su figura como la que en algún momento tuvo Laura con Nelly. Pasaron los años, seguí creciendo y a los dulces 12, en las puertas de la adolescencia se me torcieron toooodos los dientes. Tres infructuosos, costosos y dolorsos años con aparatos fijos. Para los 15 me revelé e hice que me sacaran esas cosas horribles. Igual la situación no mejoraba porque me faltaba un grano para ser choclo. El Acné me invadía como los norteamericanos a Medio Oriente, se iban de un lado y se metían en otro. Con todos estos datos era obvio que me volviera (o al menos eso intentara) algo dark. Superada la negrura de la etapa, tuve momentos en los que intenté sentirme como una mujer fatal pero no resultó, reconocí que debía seguir adelante. Adelante seguí hasta la taquilla del cine y me metí por primera vez a ver una película sola. "Todos dicen te amo" fue la primer peli que ví sola y creo que fue la primer peli... no es que no haya visto películas pero debo hacer nuevamente un alto para que entiendan algunas cosas. Mis padres fueron por última vez al cine en 1965 a ver una película llamada La estatua y su actor principal era David Niven , mi mamá no compra música porque cree que es perder dinero y mi papá odia hacer cualquier salida excepto las que incluyen comida. En medio de ese cuadro me encontraba yo que obviamente hacía lo que podía. Ese día (el de la pelí) decidí muchas cosas, la primera fue que no era malo ser algo distinta a toda mi flia, la segunda era que visto que no me sentía linda debía encontrar otra manera de insertarme en el mundo. Descartando una posibilidad tuve que ingeniarmelas para encontrar otras, me quedaba la cultura, la inteligencia, el humor (bueno o malo da lo mismo) o alguna habilidad no descubierta hasta el momento (no piensen mal que no me refería a eso). Ahí estaba parada yo con 19 años y una vida que no entendía. En ese momento decidí que la salvación era escribir, pensar y ser lo más libre que pudiera. Umm, tuve un par de tropiezos ya que las veredas de Buenos Aires están plagadas de pozos pero al mejor estilo Sony (100% actitud) proseguí mi camino hasta aquí.
Por cierto, como habrán notado por un par de citas en este texto he pasado muchas horas de mi vida frente al televisor, no me arrepiento y es más continúo con ese ejercio.
Que las hay, las hay

Sí, está lleno de brujas por todas parte. Quizás en mayor número dentro de mi núcleo familiar y aparentemente he heredado los dones. Realmente no hay que ser mago para darse cuenta, seguramente cualquiera de mis compañeras de oficina lo hubiera notado... luego de dos intensa semana de salidas -aparentemente desde que Arus está en MX mi agenda comenzó a llenarse- estoy hecha una porquería. Las ojeras crecen y ya no tienen límite ¿Alguna vez vieron a alguien con ojeras en la panza? ¡Espero no encontrármelos! No es cuestión de exagerar pero voy a citar algún ejemplo para que puedan entenderme:
El martes durante la cena, la comida iba del plato a mi boca automáticamente como si tuviera piloto automático, roce levemente una copa con agua... el final previsible por suerte no llego porque la misma torpesa que me caracteriza contiene un rasgo de agilidad que me hizo atarjarla en un sólo movimiento, pero estuvo cerca.
Pensándolo mejor ayer hubo un hecho más acorde a mí círculo amistoso y las pavadas que pueden surgir en el. Estaba en la heladeria con un billete de cinco pesos y el helado en la mano cuando le digo a Verónica: "Lo que pasa es que yo necesito más cerveza para llegar a casa". En fin, las cervezas no me iban a llevar a casa pero las moneditas que me proporcionó el cajero fueron de suma utilidad. El relato de estos hechos es francamente más aburrido que verme haciendo todas esas pavadas una detrás de la otra.
Veamos, creo que la conclusión es que debo volver pronto a la "normalidad" el tema es como lograrlo. No recuperaré mi imagen de ama de casa aburrida y oprimida por el trabajo hasta que mi coequiper, mi partener, no retorne a las pampas para asegurarse que mi intachable imagen de boba hogareña continúe donde estaba.

miércoles, abril 12, 2006

1 semana = 8 años

Es matemática pura, si tu amor se va lejos aunque sea una semana es como si estuviera 8 años lejos. Hago la cuenta, sa va tres semanas por lo que vamos a estar 24 años separados ¡Es muchísimo! Para cuando llegue voy a tener como 53 años, estará en pareja con una ANCIANA... Habrase visto Será la falta de costumbre pero realmente es aburrido estar tanto tiempo sola. El primer día dormí como una bestia. Ni la bestia de mi gata durmió tanto como yo. El segundo día estaba ansiosa pero me la aguanté. Después empecé a ver amigos y a hacer cosas que yo
misma relego en mi vida para otro momento (excusas obvio). Hice todas las cosas típicas de mujer cuando tiene tiempo libre y está sola. Leí, vi Discovery Home and Health, volví a ver los capitulos viejos de Sex and the City, me hice baños de crema, me hice limpieza de cutis... después de pasar la primera emoción de retomar mis actividades femenínas caí en el burrimiento entoces ya tenía tiempo para depilar pelo x pelo de la pierna con la pinza de depilar (sí una chinada de las que me gustan a mí), me quedaba hasta cualquier hora mirando la tele xq no me podía dormir. Yo que siempre soy tan torpe y que en cada ocasión que giro o me levanto golpeo mortalmente a Ariel ahora no tengo a quien golpear con mis torpezas, la taza no le da en el pecho a Ari simplemente se cae derechito al piso (ahhh ud creían que Ariel hacía Artes marciales porque le gustan los deportes, mentira lo hace para defenderse de mí) soy como la 99 sin Max, un horror...Todo este trastorno sin sentido terminará, espero, en escasos 16 años así que quizás para la próxima entrada escribe una frustrada cuarentona que no tiene nada más que hacer en la vida que ir al programa de Karina Mazzoco esperando una transformación exitosa que le agregue 15 minutos de distracción a su vida.
¿Por qué el anillo? Es una respuesta que aún estoy buscando