lunes, julio 17, 2006

Just in time

Las noches a la vera del río suelen ser húmedas, pesadas y esta no era diferente. Estabamos en el salón, el piano de cola negro conquistaba cualquier mirada. Me prepare durante mucho tiempo para vos y la escena era como la había soñado, estaba todo planeado. Vestido negro, pelo levantado. Intentaba parecerme a Golightly. Quería que la experiencia fuera única. La melodía comenzó a sonar en el piano pero seguíamos solos. Me sentí tentada y comencé a cantar "Just in time. You found me just in time" es eso lo que siento. Hay un sinfín de hechos que nos unieron durante años aún sin saberlos y me cuesta increible la resistencia que opones al destino. No importa si es efímero o eterno lo importante es que es, tiene una entidad y no podemos negarla. De pronto nos transportamos en tiempo y en espacio y te tengo frente a mí, de traje, melancólico agitando el vaso de whisky. Todo es un gran cliché pero se ve perfecto para nosotros, para la situación. No debemos tener. El sólo de piano inunda el ambiente, la sensualidad me recorre y te llega, se que te llega. La brisa recorre mis mejillas y abro los ojos, la realidad me devuelve. Estas aquí.
Lo que significa

Siento que puedo describir cada grano de arena. Llevo aquí muchos años. No se como llegué y tampoco como sobreviví ya que era muy pequeña. Durante este tiempo me dedique a observar cada uno de los granos que componen esta enorme playa. Cuando el agua llega y se los lleva siento un gran vacío en mí, ellos son mi única compañía. A diario la playa se renueva pero es increible ver como algunos siempre quedan, con ellos he logrado mayor confianza, nos contamos historias y si en algún momento parten hacia el mar cuando vuelven me cuentan sus aventuras. Siempre es interesante saber que sucede en el fondo del mar, o al menos a mí me interesa. En la Isla pasan un millón de cosas pero intento no meterme demasiado en ella porque me da algo de miedo. La costa parece más amigable y el paisaje siempre es hermoso. El agua y el cielo se funden allá lejos, no se si dan la vuelta y uno comienza donde termina el otro... A veces las nubes se enojan por tanta belleza y empañan el cielo con colores oscuros. Los días transcurren y no se de que se trata la vida pues no tengo con quien compartirla. Recuerdo que en una época vivía con gente en un lugar donde había muchas personas pero una tarde de enero alguien me subió a
un barco grande, inmenso y ahí estuve hasta que el mar se tragó a todos. Acá estoy, desde ese momento y acá permaneceré, quizás alguien me recuerda y vuelvan a buscarme.

martes, julio 11, 2006

Cuasi perfecto, cuasi imperfecto

Cómo salidos de una novela romántica me encuentro frente a una dicotomía y creanme que no es de las sencillas. La primer similitud es la protagonizada por la dupla de galanes yuxtapuestos: Daniel Cleaver y Mark Darcy en "El diario de Bridget Jones".
Cleaver era lindo e inteligente, combinación fatal para aquellas que gustan sufrir el amor de un cretino simpático. Darcy por su parte tenía elementos torturadores pero era amable, cariñoso y atractivo. Esta dupla, o una muy parecida, la he vivido casi continuamente en mi vida y creanme es insoportable el nivel de angustia que se puede alcanzar. A ver, si una se la pasa rompiendo las bolas por años con que te gusta un cretino, le parte la cabeza a las amigas y da vueltas el tema 80 mil veces sin encontrar respuestas cuando llega finalmente el bombon simpático que te gano por dulzura tus amigas te quieren matar. La verdad es que si una amiga mía tuviera tantas vueltas como las tengo yo seguramente no seríamos amigas. Es que parece que el bien y el mal se complotan contra una justo en el momento en que la resignación formaba parte de la decisión final. Ahí está parada una, equidistante de los dos extremos, el cuasi perfecto principe de cuento de hadas y el cuasi imperfecto chanta que te parte la cabeza sin explicación. Dirigirse hacia uno de los dos puntos puede ser uno de los riesgos más grandes de tu vida, el principe puede no ser tan perfecto y el chanta puede ser menos defectuoso de lo que una imaginaba. Pero... ¿cómo dejar de idealizar ambas figuras? ¿Se puede probar cada bombon y quedarse con el más apetitoso? Lamentablemente esta respuesta me la se: NO.

lunes, julio 10, 2006

Correr no te aleja porque a donde vayas te sigue. Intenté alejarte pero te tuve más presente.